Cuba Ala Décima

Resultados del XII concurso
nacional Ala Décima

Leonardo Estrada, de La Habana, Premio Ala Décima 2012. Celebrado el duodécimo aniversario del Grupo Ala Décima, que saludó de este modo la XXI Feria Internacional del Libro

Alberto Núñez Betancourt, director del periódico Trabajadores (a la izquierda), entregó al joven poeta laureado una obra pictórica de Manuel Fernández Malagón.

Fotos: Roberto Carlos Medina
Ampliación de la versión publicada en Trabajadores digital

Esa tarde, la perenne lluvia impidió el acto en el amplio y florido traspatio de la biblioteca Tina Modotti, en Alamar. Unas ochenta personas tuvieron que refugiarse en la reducida salita interior de la institución para efectuar su peña semanal, dedicada esta vez a celebrar los doce años del Grupo Ala Décima, realizar la premiación de su XII concurso nacional, y con ello saludar la XXI Feria Internacional del Libro.

Entre más de 60 poemarios procedentes de 14 provincias, el cuaderno Agua del presagio, de Leonardo Estrada Velázquez (La Habana, 1989), alcanzó el máximo galardón del certamen. Además de diploma y libros, el poeta laureado recibió de Alberto Núñez Betancourt, director de Trabajadores, una obra de artes plásticas titulada En un mundo de neblina (acrílico sobre cartulina, 52 x 70 cm) de Manuel Fernández Malagón, director artístico de este órgano de prensa, la cual fue realizada por el pintor como interpretación plástica del texto ganador.

De acuerdo con el acta del jurado —integrado por las poetisas Bertha María Gómez, Irasema Cruz e Idel Rosa Velázquez—, el poemario de Leonardo se hizo además acreedor del Premio Guillermo Cabrera Álvarez, de Juventud Rebelde, concebido para el mejor texto de autor joven, y del Premio Yazmina Calcines, de tema erótico.

Jorge Rivas (a la izquierda), jefe de la redacción cultural deTrabajadores y miembro de Ala Décima, donó una obra de la artista de la plástica Clavelis, para el Premio Yazmina Calcines, de tema erótico, merecido por Leonardo.

Por su parte, el cuaderno Entre el adiós y la espera, de Lázaro Palenzuela, de Güines, Mayabeque, conquistó el Premio especial Jesús Orta Ruiz, Indio Naborí —Premio Nacional de Literatura 1995, a quien, por su cumpleaños 90, rindió temprano homenaje esta edición del concurso Ala Décima—, y recibió libros de manos de Alba María y Fidel Antonio, hijos de ese querido poeta, además de obras de arte del Centro Iberoamericano de la Décima (CIDVI) y del artista de la plástica Ventura González.

Lázaro Palenzuela recibió el saludo de los hijos de Naborí, en nombre de toda la familia. En la foto, de izquierda a derecha, Bertha María Gómez, presidenta del jurado; Péglez; Fidel Antonio; el poeta premiado; y Luis Paz Esquivel, Papillo, director del CIDVI.

El pintor Ventura González entrega su obra a Lázaro Palenzuela.

Los restantes galardones recayeron en Lilia Aurora Machado (de La Habana; Premio del Grupo Décima al filo); Dorge Rodríguez (de Cienfuegos; Premio Décimas para el amor Hermeides Pompa, de la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, y Premio del Proyecto Naborí); Roselia López Saborit (Manzanillo, Granma) y Jesús Arencibia (Pinar del Río), ambos laureados por el Proyecto Perseverarte; Bartolo Miguel Pupo (de Puerto Padre, Las Tunas; Premio de la filial del Grupo Ala Décima en San Miguel del Padrón); y menciones para Norberto Rodríguez (La Habana), Ariesky Castillo (Cienfuegos), Yamilka González (Las Tunas) y José Fernando Orpi Gali (Santiago de Cuba).

Como Premio del Grupo Décima al filo, la poetisa Lilia Aurora Machado (a la derecha en la imagen) recibió una obra de artes plásticas de Alejandro Gispert, así como libros donados por la presidenta de esa agrupación hermana, la escritora Odalys Leyva Rosabal, Premio Iberoamericano Cucalambé 2008. En el extremo izquierdo de la foto, Idel Rosa Velázquez y Bertha María Gómez, del jurado.

El veterano poeta repentista Sergio Amaral recibió, por encargo de su amigo Bartolo Miguel Pupo (de Puerto Padre, Las Tunas), su Premio de la filial del Grupo Ala Décima en San Miguel del Padrón.

Roselia López Saborit (a la derecha) vino desde Manzanillo, Granma, a recibir su Premio del Proyecto Perseverarte, que le fue entregado por la poetisa Irasema Cruz (a la izquierda), integrante de ese proyecto artístico y del jurado.

El Proyecto Perseverarte concedió también premio a un autor joven, el cual fue a manos de Jesús Arencibia, de Pinar del Río.

Norberto Rodríguez Barallobre, de La Habana, recibió mención.

Además de la premiación del certamen, el encuentro sirvió en sus inicios para pasar balance a las numerosas actividades realizadas por el Grupo Ala Décima durante el pasado año, para anunciar ajustes estructurales acordados por la membresía de la agrupación y para presentar, en formato de folleto, el cuaderno Diatriba, de Caridad González Sánchez (Santa Clara, 1945), Premio Ala Décima 2011, esto último a cargo del poeta Isbel Díaz Torres. Los ejemplares del cuaderno Diatriba fueron recibidos por Mariana Pérez Pérez, miembro del Grupo Ala Décima y su representante en Villa Clara.

Péglez leyó el informe de balance del Grupo Ala Décima. En el extremo izquierdo, el poeta Isbel Díaz Torres, que poco después presentó el cuaderno Diatriba, del cual fue editor y diseñador. De fondo, como complemento visual, dos pinturas del artista Carlos Parker acompañan el retrato de Tina Modotti, cuyo nombre lleva la biblioteca.

La cita literaria estuvo complementada por la actuación del dúo dramático musical Ad Líbitum y cerró con una ronda cantada entre los repentistas Ernesto Guerra, Emiliano Sardiñas, Luis Paz Esquivel (Papillo) —director del CIDVI— y el premiado Lázaro Palenzuela, también director de la Casa de la Décima de Güines, todos acompañados por jóvenes músicos de esa institución mayabequense. Entre las numerosas décimas improvisadas, hubo alusiones a la persistente lluvia de esa tarde, y de una de esas estrofas son estos versos de Papillo: