Naborí
en la
huella
Para los poetas decimistas, el Primero de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores, es razón añadida para evocar una presencia permanente en nosotros: la de Jesús Orta Ruiz, el Indio Naborí (1922-2005), Premio Nacional de Literatura 1995 y Héroe del Trabajo de la República de Cuba en 1998. Sintetizador poco común de “lo popular” y “lo culto” en la poesía cubana del siglo XX, su vida fue además reflejo fiel de las ideas a las que se consagró con ejemplar honestidad. Acerca de su obra recoge Cubaliteraria, portal de literatura cubana, valoraciones críticas y aspectos de su poesía escrita y de su poesía oral, así como de su labor ensayística. Al poeta que, en sus inicios, en vez de autodenominarse “cacique” —como cierta costumbre entre los repentistas de su época— prefirió el calificativo más humilde entre nuestros aborígenes, el de “naborí”, vaya este sencillo tributo en una estrofa, que responde a un pie forzado del periodista y poeta Héctor Arturo:
LAS PENAS DEL NABORÍ
A Jesús Orta Ruiz
De la estrofa, padre nuestro:
Déjame —escolar sencillo—
ensayar desde un “sextillo”
tu estatura de Maestro:
Llevaste a cimas del Estro
el ala del colibrí;
bebiste luz de Martí
para iluminar tu huella;
¡y transformaste en estrella
las penas del naborí!
EN NUESTROS ARCHIVOS:
—Entrevista Entre la bandurria y el espejo, del 2002, año en que cumplió 80 años, perteneciente al libro en su homenaje Hasta siempre, Naborí, publicado por Ediciones David, de
—Naborí siempre con nosotros, que incluye glosa a él dedicada por Héctor Arturo.
—"Los sillones más allá de las estrellas”, con su décima Madrigal de la neblina y texto de Fidel Antonio Orta.
—Flores por Naborí a finales del año. Incluye su poema Guajirito.
Etiquetas: décima, Indio Naborí, poesía, Primero de Mayo, tributo
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