El homenaje de su patria chica
Esa mañana el verano neblineaba en el Parque
Naborí, que nos anuncia el arribo a sus predios de infancia. Cerca del muro
con el perfil del bardo, el follaje del entorno se movía como en caricia, tal
si presintiera que, al mediodía, una nueva metaforización de la feliz complicidad
entre hombre y árbol nos sería revelada.
En ese contexto se realizó la premiación del concurso
que lleva su nombre —el único certamen en que se compite glosando versos
del emblemático autor de Viajera
peninsular…—, cuyo principal
lauro mereció esta vez Olimpia
Pombal Duarte (Remedios, Villa Clara, 1935), mediante un hermoso poema con
la estructura tradicional del romance, tan cercano a la décima, y que lleva por
título Hombre y árbol, obra en la
cual recreó los versos del texto naboriano Romance del
árbol.
Al encuentro asistió una representación de la familia de Jesús
Orta Ruiz, encabezada por su hija, la escritora Alba
Orta Pérez, que entregó el galardón principal. Antes de la premiación, la investigadora María
Eugenia Azcuy (Maruly), quien fuera asistenta literaria del poeta, recordó
ampliamente su trascendencia en el panorama sociocultural contemporáneo, y fue
reconocida la valía del quehacer sostenido de la filial
de Ala Décima en San Miguel en favor de la preservación de su
legado, lo cual fue subrayado también por Antonio
Borrego al leer el
acta del jurado.
La dirección y los trabajadores del Museo Ernest
Hemingway brindaron al encuentro un inestimable respaldo, así como creadores
residentes en el municipio que cedieron obras de artes plásticas, entre ellos
Daimer Reyes, recién venido desde Santiago de Cuba a residir en el territorio.
La apoyatura musical a la cita llegó en la voz de José Luis Arango, cantante de
la agrupación de Pachito Alonso, y la presencia de la décima se extendió en
numerosas lecturas, entre ellas de Antonio
Borrego en un mano a mano con una improvisación del también destacado poeta Luis
Paz Esquivel, Papillo, director del CIDVI, para que
estuvieran representadas las dos vertientes que Naborí
puso en alto por igual: la escrita y la oral repentizada.
La ganadora del certamen, Olimpia
Pombal Duarte, tiene publicados, entre
otros, los libros de poesía para niños Con alas de seda (Editorial
Capiro, 2004) y Diario del Zoo (Editorial Sed de Belleza,
2010). Es una fiel
contertulia de La décima es un árbol, que conduce en Santa Clara Mariana
Pérez Pérez, ganadora de este certamen en el 2014. Olimpia
cuenta con numerosos reconocimientos en concursos provinciales y nacionales,
entre ellos el de tema erótico en el XVI
concurso nacional Ala Décima —premiado en febrero de este año— con su
cuaderno Quiero
que vengas ayer. Con el poema Hombre y árbol, merecedor de este VIII
Premio nacional de glosas Jesús Orta Ruiz, nos hace repensar Olimpia
el tema antes poetizado por Naborí:
El hombre es un árbol móvil
de fuertes y añosos brazos
que sueñan tocar el cielo
antes que llegue el ocaso (…)
(El poema completo,
próximamente, en este sitio. Versión original de la reseña, con el siguiente
link en Trabajadores).
INFORMACIONES RELACIONADAS:
EN NUESTRA SECCIÓN DECIMACONVOCA:
Cuba Ala Décima recomienda, a nuestros miembros y colaboradores que
conducen citas literarias en cualquier parte de Cuba, visitar el directorio de
estos espacios que está ofreciendo el poeta Jorge
Bousoño en su blog Por poesía
voy, anexo a su proyecto AlasCUBA.
Etiquetas: concursos, décima, escritores, homenaje, Indio Naborí, poesía, San Miguel del Padrón, tributo
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