Toda luz y Ala Décima invitan para el día 22

La pospuesta cita de dos

agrupaciones hermanas

 

El encuentro de los grupos Toda luz y Ala Décima inicialmente previsto para julio y cuya posposición fue anunciada en ese propio mes por razones de salud entre los hermanos espirituanos, será el lunes 22 de septiembre a las 3 de la tarde en la sede permanente de Ala Décima, la peña de cada lunes en la biblioteca Tina Modotti, calle 162-D número 333 entre 3ra. y 162-C, zona 1, Alamar, municipio de La Habana del Este.

Con ello, dos de las numerosas agrupaciones decimísticas que hoy trabajan fraternal y articuladamente en el país intercambiarán proyectos, experiencias, poemas y canciones. El Grupo Ala Décima —adscrito al Centro Iberoamericano de la Décima— concibe la cita como parte del plan de celebraciones de sus quince (7 de febrero del 2015) y recibirá con infinito cariño a la representación del Grupo Toda luz y toda mía, encabezado por su presidenta Merari Mangly Carrillo y su vicepresidente Daniel Cruz Bermúdez.

Por solicitud de los hermanos poetas de la agrupación espirituana, esta ocasión será además oportuna para la presentación en premier del libro Toda luz. Décima escrita espirituana (1997-2012), por Ediciones Luminaria, a cargo del Doctor en Ciencias Filológicas Virgilio López Lemus (foto a la izquierda), reconocido ensayista y poeta nacido en Fomento, Sancti Spíritus, y residente en La Habana. También se efectuarán premiaciones complementarias del III concurso Toda luz y toda mía, en este caso las entregas pendientes de dos lauros colaterales: el premio Solidaridad, otorgado por el ICAP, a la mejor obra escrita por autor no residente en Cuba, que correspondió a Frank Upierre Casellas por su obra Ausencia quiere decir olvido (Diario de la Soledad), y el galardón del Grupo Nacional de Escritores Rurales en ese certamen, a Marcelina García Moreno (espirituana residente en La Habana), por su poema Entrañable, del cual adelantamos la estrofa final:

Los ojos del campanario

de la Iglesia Parroquial

en el lienzo celestial

acuñan mi relicario.

Llevo por siempre un rosario,

que trama la invocación,

con hebras de una oración

al Dios que no lleva cruz:

“Sancti Spíritus, tu luz

brille en mi reencarnación”.

INFORMACIONES RELACIONADAS:

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