Leandro Camargo,
de Pinar del Río,
ganó el concurso
de improvisación
Francisco Pereira
Por Beatriz Sosa
Tomado de Diversarima
El Centro Iberoamericano de la Décima y el Verso Improvisado (CIDVI), en coordinación con la Casa Naborí, con sede en Limonar, Matanzas, organizó el IX Concurso Nacional de Jóvenes Improvisadores “Francisco Pereira” in memóriam, realizado días atrás.
Al evento se presentaron 20 concursantes de todo el país entre las edades de 18 y 35 años, en su mayoría jóvenes improvisadores provenientes de los Talleres Especializados de Repentismo Infantil. Asistieron además especialistas del CIDVI y de la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, de Las Tunas. Los solistas Yanni Suárez (La Habana) y Lucios de la Nuez (Matanzas) deleitaron a los presentes con tonadas y rancheras.
Después de dos intensos días de poesía oral, laúd, tres y guitarra, el jurado, integrado por relevantes poetas improvisadores: Orestes Pérez, Juan Carlos García Guridi (
•MEJOR CANTOR: Yoanis García
•MEJOR PIE FORZADO: Cindy Manuel Torres (Pinar del Río)
•POPULARIDAD: Reibel Nodal (Ciego de Ávila) (compartido) Ricardo González (Matanzas)
(Versión original en Diversarima)
Leandro Camargo (Los Palacios, Pinar del Río, 1987) no solamente es un sorprendente joven repentista, sino es además un estudioso de la poesía en estrofas de diez versos. En julio del pasado año 2009, participó en el evento teórico del XVI Encuentro Festival Iberoamericano de la Décima —dentro del programa de la XLII Jornada Cucalambeana, en Las Tunas—, donde leyó una ponencia en el panel que realizó una interesante aproximación a Gabriel de la Concepción Valdés, Plácido y Juan Cristóbal Nápoles Fajardo, El Cucalambé, como voces significativas de la décima cubana en el siglo XIX.
Tras los aplausos por su exposición, la Doctora María Teresa Linares le preguntó si alguna vez había tenido que improvisar con un pie forzado de una sola palabra. Leandro le dijo que no, y la Doctora le invitó a que lo hiciera con el siguiente: “pormenorizadamente”. Tras unos segundos de silencio, y sin la “tregua” que los acordes musicales brindan al repentista, el joven dijo:
Esto es tan improvisado
que yo ni me lo esperaba.
A veces toca la aldaba
quien es menos esperado.
El texto fue preparado
sencilla y humildemente,
pero al menos fue decente,
porque es un riesgo de artista
hablar sobre un repentista
pormenorizadamente.
Etiquetas: décima, jóvenes, Matanzas, Pinar del Río, repentismo
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal