Una poetisa espirituana:
Yolanda Rodríguez

La central provincia de Sancti Spíritus participa de la tradición decimística del país, tanto en la vertiente oral improvisada como en la vertiente escrita. Apasionados de esta última hay numerosos escritores en la región, muchos de ellos de recientes promociones poéticas, y abundan las decimistas, como nuestra querida colaboradora en ese territorio, Merari Mangly Carrillo, nacida en 1966 y a cuya obra se puede acceder en nuestros archivos, con poemas como Oración y Con tu pecho mío, entre otros.

En representación de esa provincia traemos ahora a Yolanda Rodríguez Toledo (Sancti Spíritus, 1972, en la foto), también narradora, escritora para niños y jóvenes, y artista de la plástica. Su obra literaria ha sido publicada en revistas y antologías. Recientemente obtuvo el premio nacional Eliseo Diego con el libro de poesía infantil Wendy no conoce el mar, y el internacional Poesía de Primavera, en Castellón, España. En el VIII concurso nacional Ala Décima, uno de los premios accesorios, el de Décimas para el amor “Hermeides Pompa”, auspiciado por la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, de Las Tunas, lo mereció Yolanda con su cuaderno Pendular de la cuerda, del cual ofrecemos sus estrofas finales.

Al final de cada estancia
están tus ojos. Perdidos
los avatares. Dormidos
los aguaceros. Enrancia
es la palabra distancia,
penetración que recuerda
la exaltación, sin que pierda
su inanimado sentido.
Viene un inmenso gemido
a pendular en la cuerda.

Vuelve el espacio que oscila
a regresarte, y no miente
este agujero que siente
otro temblor que vacila,
salta de abajo, cavila
en mis instintos la llaga,
venda mi luz , y soy vaga
insinuación de lo frágil
porque soy cuerda, y soy ágil
constelación que se apaga.

Para comunicar con la autora vía email: arley07031@ssp.jovenclub.cu