Cuba Ala Décima

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jueves, febrero 14, 2008

VIII concurso nacional
Ala Décima

Premio Décimas
para el amor
"Hermeides Pompa"

Pendular de la cuerda, de Yolanda Rodríguez

En el recién concluido VIII concurso nacional Ala Décima, uno de los premios accesorios, el de Décimas para el amor “Hermeides Pompa”, auspiciado por la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, de Las Tunas, recayó en el cuaderno Pendular de la cuerda, de la poetisa Yolanda Rodríguez Toledo (Sancti Spíritus, 1972), también narradora, escritora para niños y jóvenes y artista de la plástica. Su obra literaria ha sido publicada en revistas y antologías. Recientemente obtuvo el premio nacional Eliseo Diego con el libro de poesía infantil Wendy no conoce el mar, y el internacional Poesía de Primavera, en Castellón, España. De Pendular de la cuerda ofrecemos el segmento inicial del cuaderno.


PENDULAR DE LA CUERDA

…Pero el tiempo es un absurdo
rencor que no sé quitarme.
Freddy Laffita López

Leve signo anida en ti.
Soy mujer que no ha cantado
las notas de un iniciado
presentimiento. No fui
antes del sueño. Viví
miles de culpas. La suerte
es un pasaje que inerte
bebe mis pasos. Camino
los azahares. Peregrino

no regreses con la muerte.

No dejo nada. No amparo
cielos, ojos si no brillan.
Sombras azules ensillan
y se descalzan —es raro—

su tormento. Un disparo
es la palabra que buscan.
Tomo un trago si se ofuscan
las virtudes. Soy la nada.
Y colocó su mirada
donde mis ojos la buscan.

Soy la sombra que no acierta
en conquistar su reflejo.
Vienen las curvas, destejo
los contornos de la puerta.
Ven lirismo, desconcierta

tanto esplendor, su figura.
Trueca mi mano la oscura
inclinación del retorno,

es el desplome un contorno
desdibujado en la altura.

Estoy muriendo, y la muerte
es un silbido distante.
Vuelve a latir, circundante
revelación; mano inerte
que la penumbra convierte
en destellos. El hastío
llega despacio, y es frío
su rostro; palabra ilesa
es el partir si regresa

con su deidad el vacío.

¿Dónde dices que ha crecido
ese bosque que no alcanzo
a descifrar? Sin descanso
voy a su encuentro, en mi oído

los árboles y el sonido
son un golpe que la mar
deja al viento sin girar
por mis límites, la arena
es una sombra serena
calcinada por la sal.

Para comunicar con la autora vía email: arley07031@ssp.jovenclub.cu

1 Comentarios:

  • A la/s 5:54 p.m., Anonymous Anónimo dijo...

    Muuy bonito el poema. Tiene buena inspiracion.

    Saludos!

     

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