Un poema desde Miami
"Te agradezco el envío a Péglez de este texto
que me ha costado comentarios denigrantes, ofensivos a mi hombría y a mi madre
fallecida, pero no importa, es mi cuota moral a mis sentimientos. Yo y muchos
acá, SOMOS FIDEL. SOMOS EL CHE, SOMOS MARTÍ. Estoy con ustedes en el dolor
acumulado pero también en el orgullo de haber conocido al invicto Comandante en
Jefe. Ahora FIRMEZA y UNIDAD son las palabras del día".
LUZ DEL ASOMBRO
¡Siempre presente!
Desde Birán al Moncada
fue tejiéndose en la Historia
el estambre de la Gloria
con su rebelde puntada.
Fue en el Turquino alborada
y ejemplo de cubanía,
fue en América ese guía
con su vista al horizonte:
el caguairán de su monte
no ha caído todavía.
El corazón de un país
palpita en la caravana
con sístoles en La Habana
y diástoles en la raíz
de un pueblo que va feliz
con esa honda tristeza
de conocer con certeza
que, en lo gris de la ceniza,
jamás el bien agoniza
cuando la muerte lo besa.
Y allí viene, de regreso
por la ruta de la gloria,
invicto, entrando a la historia
junto a las alas de un beso
de la Patria. Hay un proceso
que hace diamante al carbón
del fondo del corazón
y, en esa luz del asombro,
una estrella sobre el hombro
ilumina la razón.
CUBA-EUA
Dic. 2, 2016.
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Etiquetas: Cuba, décima, Estados Unidos, Fidel Castro Ruz, homenaje, poesía, tributo
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