De Plácido, una anécdota,
una décima, un concurso

Con el fin de promover la reflexión acerca de la figura y la obra del poeta Plácido en el bicentenario de su nacimiento, y su significación dentro de la tradición cubana, la Asociación de Escritores de la UNEAC y el Instituto Cubano del Libro convocan al Concurso de ensayo Bicentenario de Plácido. Los textos –entre 30 y 50 cuartillas– deberán entregarse, en copia impresa, en la sede de la Asociación (17 y H, Vedado, La Habana, Cuba), y se identificarán con seudónimo. El plazo de admisión vence el 15 de julio de 2009. Vea las bases completas de la convocatoria, mediante este enlace, en nuestra sección DECIMACONVOCA.

Se cuenta que Plácido, invitado a una fiesta de la aristocracia como era frecuente, para que allí divirtiera a los presentes con sus juegos de ingenio, descubrió a una joven cuya belleza le impresionó; sabía que sería mal visto que él le dirigiera un elogio a su belleza (no podemos olvidar que Plácido era mulato y pobre), pero ocurrió que, en un momento determinado mientras la joven reía, un mosquito entró a su boca y le provocó un ataque de tos. Rápido y demostrando su condición de repentista Plácido improvisó la siguiente décima:

Andaba revoloteando
En el ambiente exquisito,
Muerto de sed, un mosquito,
Néctar de flores buscando.
Llegó a tu boca y pensando
Que era una rosa, o clavel,
Introduciéndose él
Por tu boca que le encanta
Muere en tu dulce garganta
Como en un vaso de miel.

Tomado de Diversarima. Vea sitio especial sobre el poeta en Cubaliteraria.