Elogio
del silencio

Del libro Donde dice primavera y es otoño, de Pedro Péglez González, premio de décima en los V Juegos Florales de Matanzas (2006); Ediciones Matanzas, 2007.

ELOGIO DEL SILENCIO

Con un cocuyo en la mano
y un gran tabaco en la boca…

Juan Cristóbal Nápoles Fajardo,
El Cucalambé

Qué de encajes se deshila
bajo mi piel. Ya no alcanzo
a sentir en mí tu manto
sideral. Ni tu caricia
perfumada a mar antigua
rejuvenece mi bruma.
No me abanica la túnica
entre mi cuerpo y mi pez
ataviado por la sed
de los siglos. En la ruta
de Locri hacia Mitilene
te espero con mi remota
constancia de Juan Cristóbal.
(¿Quién urdió la cruel especie
de mi pérdida?) El birreme
de Eros me condujo aquí
desde mi Santiago añil.
Hice Adriático el Caribe
por ti, Nosside. Ah Nosside,
por ti palpita en la vid
mi negra miel. Mas te pierdo.
Te pierdes en la distancia
queriendo uncirte a mis ancas
cuando ya te he descubierto.
Mejor quédate silencio
sobre las aguas. Desdobla
las estrellas en tu cofia
por verme. Yo quedo náufrago
con un tabaco en la mano
y un gran cocuyo en la boca.

En nuestra sección Decimacontexto: EN ETERNA PRIMAVERA, por Bárbaro Velazco, presentación del decimario Donde dice primavera y es otoño, en Matanzas.