Rosas blancas para Anisia Giz

Hemos perdido a una hermana

 

La noticia nos sorprendió dolorosamente. Ya no podremos contar físicamente con Anisia Giz, el alma entusiasta —a fuerza de sobreimponerse con valor y alegría de vivir a una penosa enfermedad que la aquejaba desde mucho tiempo atrás—, conductora alternativa de la peña semanal sede del Grupo Ala Décima en la biblioteca Tina Modotti y emotiva contertulia de muchos otros espacios artístico-literarios como la peña La pipa de la paz, de Diego Ulloa, y la peña Horizontes de Nuestra América, de Gisela Ferrer, entre otras; tertulias todas que le rendirán homenaje. Por su voluntad, sus cenizas fueron esparcidas en las áreas de la Casa de Cultura de Alamar. Ahora nos toca, para seguir su ejemplo, convertir este dolor compartido en nuevas fuerzas para seguir trabajando en favor de la elevación espiritual del ser humano. En nosotros seguirá viviendo.

En este momento, se nos está permitiendo visualizar solamente las dos o tres últimas entradas, lo cual está absolutamente fuera de nuestras manos, de modo que a la recomendación que siempre hemos hecho a nuestros visitantes de atender a las informaciones recogidas en el panel derecho, añadimos la de ver el sumario —los diez textos más recientes—, en los finales de ese panel.