Controve
rsia: los viajeros (2)
Frank a Karel
Continúan su intercambio por email
dos miembros del Grupo Ala Décima
En respuesta al mensaje anterior por email de Karel Leyva, el también poeta Frank Upierre —Guanabacoa, 1956; uno de los iniciadores del actual proceso de revitalización de la décima, que continúa ahora en Moscú, cumpliendo contratos artísticos como trovador— le respondió con estas estrofas.
los Ulises que han querido
bucar puerto en otra arena
el diente de la condena
en sus carnes ha comido.....
Ulises no fue un perdido
salió a buscar otra luz
que desinfestara el pus
oscuro de su aislamiento....
no quiso ese cruel tormento
del estancado en la cruz....
¿por qué será que al hablar
de distancia suene a horror...
a obligado desamor
a ser un hijo del mar?....
¿qué dios parece enredar
esas quillas navegantes?
¿qué sirenas simulantes
calumnian en el concilio de la espuma
que al exilio condenan a los viajantes?
Mediante este enlace, puede comunicar vía email con Frank Upierre Casellas. En nuestra sección Premiosala, su cuaderno de décimas La identidad del espejo. Otro poema y datos suyos, en el blog de la escritora y pintora mexicana Lucero Balcázar.
Etiquetas: controversia, décima, La Habana, Moscú, poesía
publicadas por PEDRO PÉGLEZ GONZÁLEZ @ 4:12 a.m.
1 Comentarios:
A la/s 7:13 p.m.,
José Miguel dijo...
Excelente sitio para dar a conocer la décima cubana y latinoaméricana, inclusive de un poco más allá.
Soy médico cubano, en misión internacionalista en Venezuela, y escribo poesía para niños.
Les envío una décima por el próximo día de las madres. Espero les guste.
Muy contento de ver a Mildre y a tantas personas que conozco, en esta página.
Saludos
José Miguel
Madre, cuán lejos estás
o qué tan cerca de mí:
desde pequeño aprendí
que yo voy por donde vas.
Tu paso se quedó atrás
que extraño su cercanía,
o es que en ese afán de guía
hoy eres mis propios pies
y hasta mi cuerpo, tal vez,
entraste mientras dormía.
Tus ojos, madre, qué bellos,
me miran con tanto amor
se subliman de esplendos,
emiten dulces destellos.
Se que navego por ellos:
me llevas a lo profundo
por su curso, hasta tu mundo
donde un corazón palpita,
y desde su sitio grita
tu amor por mí tan rotundo.
Ya no soy de tu costado.
los caminos de la vida
me dieron la despedida`
para buscar lo soñado,
pero no te he abandonado
de tí no podré alejarme,
y hoy cuando intentes hablarme
busca muy dentro de tí
en tu amor, pues decidí
para siempre allí quedarme
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