Cristián Lagos
y un poema
para
En la foto aparece protagonizando su simpático personaje Condemarzo. Ya hemos hablado de él, cuando publicamos las décimas que regaló a Bárbara Calderón, la Andariega, para que la acompañaran en su reciente viaje a Cuba.
Se trata de Cristián Lagos, dueño del café Arte Facto, lugar de notable actividad literaria en la ciudad chilena de Concepción, y que sirve de sede a la tertulia Tres mujeres nueva-mente, coordinada por Bárbara, junto a Rosa Elena Sáez y Patricia Tamblay. Él le había dado a Bárbara también este poema como un saludo de Concepción a
CONCEPCIONES DE
(De Condemarzo —único noble popular—
para los amigos de Cuba)
Desde el sur viaja a La Habana
(como pájaro en el mar)
donde todas son cubanas.
Yo les mando envuelta en lana
la bandera tricolor
con la estrella del valor
que también ustedes tienen
como marcas en las sienes
más allá del ecuador.
Cuando calla el rey de España
(al que yo no reverencio)
todos hablan y el silencio
se ahogó en el ron de la caña.
Las palabras se acompañan
en América Latina,
son hermanas, son vecinas,
relativas y absolutas
como monjas, como putas
con olor a nicotina.
Una décima humedece
de llovizna a Concepción,
como acá no hay Malecón,
pero hay martes y son trece,
no hay un verso donde empiece
a escurrir jugo de uva,
donde el corazón encuba
calorcillos invernales
como caribes australes
hacia el sur del sur de Cuba.
Etiquetas: Chile, Cuba, décima, poesía, solidaridad
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